Generamos entre 1 y 2 litros de saliva al día, una cantidad que va disminuyendo con los años y que nos permite mantener un buen estado de salud bucodental. Porque la saliva es un componente esencial a la hora de combatir distintas enfermedades que puede aparecer en nuestra boca.

¿Cómo lo hace?

• Mantiene lubricada y húmeda la cavidad oral

Esta condición es indispensable para que nuestra boca pueda cumplir correctamente con todas sus funciones. La saliva ayuda a humidificar las piezas dentales y las mucosas orales.

• Remineraliza el esmalte dental

Gracias a su concentración de calcio y fosfato, la saliva ayuda a evitar la disolución del diente y contribuye a la remineralización de las piezas dentales levemente dañadas.

• Ayuda en la cicatrización

Es una pieza importante en la reparación de los tejidos debido a su factor de crecimiento epidérmico.

• Ayuda en la limpieza de la boca

Esta limpieza natural contribuye a la eliminación de restos de alimentos y ciertas bacterias que se acumulan en nuestra boca y neutraliza los ácidos producidos al comer. Por eso es importante esperar al menos 20 minutos antes de cepillarnos los dientes y dejar que la saliva haga su trabajo.

• Participa del proceso de digestión

Su función va más allá de las repercusiones en la salud oral. También contribuye al correcto funcionamiento del aparato digestivo, participando en la formación del bolo alimentación y facilitando la deglución.

• Facilita el habla

Esto se debe a que hidrata la mucosa oral y la faringe, cuyo funcionamiento es indispensable para una correcta vocalización.

• Nos es útil en el diagnóstico de algunas enfermedades

Por todo esto es importante, conforme pasan los años, mantener una buena hidratación que le apoye y evite los casos de xerostomía (falta de segregación de saliva).

¿Crees que te ocurre esto último? ¿Notas la boca muy seca?

No dudes en ponerte en contacto con nuestra clínica dental en Granollers. ¡Pide tu cita!